Hoy en día encontrar trabajo no es precisamente un camino de rosas. Muchos jóvenes eligen estudiar una doble titulación para diferenciarse, y sin duda es una forma de hacerlo (pero ni mucho menos la única forma). Las empresas saben que acabar una doble titulación requiere dedicación, inteligencia, organización, orientación a objetivos… todas ellas características personales muy valoradas por las empresas.
En teoría, al tener conocimientos especializados sobre dos áreas distintas (aunque relacionadas) podrás optar a un rango más amplio de puestos de trabajo.